ELENA HERRARTE LETONA | COORDINADORA GENERAL DE DEBAGOIENA 2030
En 2019, se conformó la red de sostenibilidad Debagoiena 2030 con el objetivo de crear condiciones optimas para abordar con éxito los retos del futuro, desde la intercooperación entre diversos agentes y la participación comunitaria. Parte de ella son diversas instituciones, agentes socioeconómicos -el Grupo Fagor se encuentra en este grupo, y es uno de los principales impulsores de la iniciativa- y agentes sociales. Con una nueva forma de hacer las cosas, estos últimos años, Debagoiena 2030 ha abordado retos como el de la energía, la transición de la industria, la movilidad, el sistema alimentario, la inclusión del mundo laboral, la silvicultura… Elena Herrarte Letona (Arrasate, Gipuzkoa, 1980), coordinadora general de Debagoiena 2030, habla sobre la red de sostenibilidad, la comarca Debagoiena (Gipuzkoa), los retos a abordar…
¿Qué es Debagoiena 2030?
Se trata de una red de intercooperación que pretende promover la transición ecosocial de Debagoiena. Está formado por agentes de diversos ámbitos: ayuntamientos, Mancomunidad de Debagoiena, cooperativas y otras empresas, agentes educativos, centros de innovación, agentes sociales… Estamos inmersas en un contexto caracterizado principalmente por la emergencia climática. Nuestra sociedad y nuestra economía necesitan cambios profundos para lograr una exitosa transición energética. Son muchos cambios, complejos, y revolucionarán todo lo que conocemos – habrá cambios en la actividad económica, en los modelos de energía y movilidad, en la organización de nuestros territorios, en los hábitos de vida… -. Estamos hablando de una transformación colosal para la que necesariamente tendremos que incidir en todas las escalas, tanto a nivel internacional como local. En este sentido, se pretende impulsar la colaboración público-comunitaria de Debagoiena en favor de una agenda global de sostenibilidad. Debagoiena 2030 nació en 2019 y, desde entonces, ha ido creciendo: en 2020, fueron trece los que firmaron el acuerdo para impulsar la red de sostenibilidad, y en la actualidad son más de 60 los que están participando en las dinámicas impulsadas por Debagoiena 2030.
Ha mencionado la colaboración público-comunitaria. Explíquenoslo.
Es una transformación integral. La complejidad del reto es enorme. Y el tiempo es limitado. Según las personas expertas, seguramente, la nuestra sea la última generación que puede evitar daños irreparables en nuestro planeta. Ante esta situación, la intercooperación juega un papel fundamental. Debemos sumar nuestras capacidades para multiplicar así el impacto. Cuando hablamos de intercooperación público-comunitaria, hablamos de trabajar conjuntamente, compartiendo las agendas de instituciones públicas, agentes socioeconómicos, agentes sociales, ciudadanía… Debemos analizar nuestros retos desde una perspectiva comunitaria.
¿Cuáles son los principales retos de la red de sostenibilidad?
El primero, cooperar. En general, los agentes se limitan a su entorno, organización, sector o proyecto. Nos gustaría cambiar esto. El trabajo conjunto entre diferentes, escuchar y aprender a reconocer lo que se hace, son piezas fundamentales. Cada aportación suma. Y así se podrán construir propuestas más sólidas, desde el compromiso de los agentes. Cada vez son más los agentes implicados en iniciativas impulsadas por Debagoiena 2030, y esto tiene resultados. Diría que estamos generando condiciones para impulsar proyectos de mayor escala. Hasta la fecha, el Grupo Fagor ha sido el principal impulsor de Debagoiena 2030, un agente clave que ha ofrecido medios para desarrollar y reforzar la iniciativa. Y ha estado implicado en la gobernanza. Ahora corresponde a los agentes de otras áreas decidir si se suman a Debagoiena 2030.
Ha mencionado la aportación del Grupo Fagor…
Así es. El Grupo Fagor ha sido el principal motor de Debagoiena 2030 desde sus inicios. Ha sido clave en el diseño de la estrategia y lo ha apoyado económicamente. De ahí la apuesta por crear una acción comarcal en un contexto tan complejo como el que vivimos. Fagor también ha trabajado mucho para llegar a consensos con los agentes clave y sentar las bases, buscar aliados y tener la referencialidad que necesita la iniciativa. Fagor es un distintivo y una fortaleza destacable de la comarca Debagoiena, entre otras muchas cosas, por su profundo compromiso con el territorio. La propia existencia de un agente como Fagor es una rara avis. No hay muchos agentes industriales en el mundo, menos del tamaño del Grupo Fagor, que muestren este nivel de compromiso con la transformación social. Esto trae muchas posibilidades a una comarca como la nuestra.
El reto de la transición energética es muy importante para Debagoiena, ¿verdad?
Claro. El modelo energético es el principal causante de las emisiones de CO2. Esto ocurre, por ejemplo, cuando la energía proviene de quemar combustibles fósiles. La lucha contra la emergencia climática necesita, por tanto, una profunda transformación del modelo energético. Además, en Debagoiena, hay un alto consumo energético, ya que nuestro modelo de bienestar está basado en la industria. En un reciente estudio realizado por el centro de investigación Tecnalia se observa que la huella ecológica de Debagoiena está por encima de las medias de la CAV y de la Unión Europea. Por ello, el primer paso debe ser reducir el consumo energético. Después vendrán los proyectos para cubrir las necesidades energéticas a través de fuentes renovables. Ahí, tendremos que ponernos de acuerdo.
Se puede decir que Debagoiena 2030 ha cambiado la forma de hacer las cosas…
Sí. Esa es la intención y la ambición. Estamos en un periodo histórico complejo, aunque el nivel de bienestar que prevalece en Debagoiena no nos permita verlo. Vamos a tener que cambiar radicalmente la vida, la economía y casi todo lo que conocemos, con el esfuerzo y la colaboración de todos y todas. Nuestra comarca tiene unas condiciones óptimas para el cambio: agentes de distintos ámbitos, una Universidad, cooperativas y otras empresas, una Mancomunidad… La iniciativa Debagoiena 2030 nace para fortalecer todo esto. Conocimiento, capacidad, ilusión, corazón, músculo económico… Debemos aprovechar todas las herramientas.
En general, ¿qué aporta la red de sostenibilidad?
Ofrece la visión renovada que necesita el contexto actual. Gracias a Debagoiena 2030, el desarrollo sostenible está en las agendas de diversos agentes, y hay una visión que servirá para impulsar proyectos concretos. Hoy por hoy, en el contexto actual, no es fácil tomarse un tiempo para abordar retos de largo plazo. Conscientes de ello, desde Debagoiena 2030 queremos ofrecer recursos, combinando reflexión y acción. Asimismo, Debagoiena 2030 pretende aunar fuerzas y/o interconectar las capacidades existentes para desarrollar propuestas de mayor impacto.
¿Debagoiena 2030 es una iniciativa que se podría poner en marcha en otros territorios?
Cada lugar tiene sus peculiaridades, de modo que, antes de nada, necesitaríamos adecuar la experiencia a las necesidades y condiciones de cada lugar. Sin embargo, existen características clave que pueden servir a otros, entre ellas, la apuesta por la intercooperación. En definitiva, se puede decir que por ejemplo, Goierri o Beterri-Buruntza, como muchos otros, comparten objetivos de desarrollo sostenible. Por lo tanto, iniciativas, proyectos o herramientas que surjan en un lugar concreto pueden ser útiles para otros. Sin duda, la colaboración entre territorios sería muy enriquecedora.
¿Cuáles son los próximos pasos?
Seguiremos trabajando por la transición energética de Debagoiena, y para ello hemos puesto en marcha la segunda fase de la estrategia Eraginez Piztu, con el objetivo de impulsar las comunidades energéticas, la sensibilización y el proceso deliberativo a nivel comarcal. Asimismo, seguiremos con otro tipo de proyectos, como, por ejemplo, los relacionados con la silvicultura -se está haciendo a través de la cooperativa Tantai- o la soberanía alimentaria. Y también abordaremos el reto de la movilidad sostenible. La situación actual necesita cambios -oferta limitada del transporte público, uso extendido del coche particular, desplazamientos masivos producidos por la industria o la educación…-. Igualmente, seguiremos reforzando la iniciativa Debagoiena 2030, buscando mayor implicación de los agentes.
